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El día que estaba marcado en los calendarios de los “metal headbangers” bogotanos amantes del thrash metal había llegado. Era la tarde del domingo 17 de abril de 2016 y en los alrededores de Revolution Bar, los seguidores más fervientes de Angelus Apatrida se preparaban para recibir con antelación a la agrupación española con el fin de obtener exitosamente algunas fotos y autógrafos de sus integrantes, quienes unas horas antes habían llegado al aeropuerto El Dorado, provenientes de México D.F. donde tocaron el día anterior. La noche comenzaba a caer y con ella llegaban más y más asistentes, que entraban en calor con algunas cervezas y cigarrillos mientras hacían la fila que ya daba sobre la carrera 15.
A las 7:20 pm se abrieron las puertas del lugar para dar ingreso a los concurrentes. Todo estaba dispuesto; la tarima con los instrumentos en el fondo, las mesas a los costados del salón y las bebidas en la barra. El tiempo transcurría rápidamente entre brindis, amenas charlas y saludos cordiales, cuando de repente atravesaron entre la gente los integrantes de la reconocida banda caleña Sagros, la cuota colombiana escogida para esta contienda de thrash metal. Pronto se escucharon los primeros riffs de su poderoso tema “Asesinos” de su álbum “Anger Blinds the Mind”, con el cual abrieron su impecable repertorio que incluiría dos covers de la banda estadounidense Slayer. Los espectadores ya no lo eran más, ya que agitaban enérgicamente sus cabezas mientras gritaban la letra de “Inhumanity”, tema con el que cerraron esta corta pero intensa descarga musical. La agrupación bajó del escenario entre clamores y aplausos, no sin que antes Sergio Gaviria, voz y guitarra líder de la banda, agradeciera de viva voz a los allí presentes y a Tayrona por hacer este evento posible.
Acto seguido y hacia las 9:10 pm, los “roadies” de Angelus apátrida se encontraban en la tarima ultimando detalles del sonido para la puesta en escena de la banda de Albacete, que subió a tarima casi de inmediato. Eran las 9:25 de la noche cuando se dejaron oír los primeros golpes de batería de la canción “Immortal” que traía consigo en la maquinaria a Víctor Valera, en la guitarra a David Alvarez, en al bajo a José Izquiero y en la voz y guitarra líder a Guillermo Izquierdo; también conocido como “Polako”, quien desbordaba de una energía que contagió rápidamente al público. Al final de la primera canción llegó el saludo del “Frontman”, quien después de gritar en el micrófono: “buenas noches Bogotá” anunció el siguiente tema que sería, “Violent Dawn”, mientras hacia una seña al público pidiendo claramente con su dedo índice un “Mosh pit”, que se desenvolvió entre fuertes sonidos y luces rojas, violetas y blancas.
El furor era total, los músicos se hidrataban después de su tercer tema, “End man”, mientras los asistentes gritaban al unísono: “Angelus, Angelus, Angelus”; es este momento que “Polako” hace la presentación de la banda diciendo: “somos Angelus de España y estamos por primera vez en vuestro precioso país”, anunciando también el siguiente tema del tan anhelado repertorio: “Vomitive”, al cual le siguieron los impecables, “Of men and Tyrants” y “Fresh Pleasure”. Antes de este último tema salido del cuarto álbum, Guillermo dijo a los espectadores: “Venimos de gira por Suramérica y hemos estado en Argentina, Chile, Perú, Bolivia, México y Panamá, muchísimas gracias por hacer el mejor concierto de esta gira hasta ahora”, y un poco después: “Quién iba a pensar que un domingo, a esta hora, nos íbamos a encontrar con un público como éste, acá en Bogotá”; era evidente que cada uno de los integrantes de la banda estaba disfrutando enormemente su puesta en escena y éramos nosotros los honrados con esta extraordinaria presentación.
Las paredes de Revolution Bar retumbaban, el suelo temblaba y el techo parecía venirse abajo; no había espacio para la cordura, cuando la voz del vocalista se levantaba de nuevo entre un fuerte riff de guitarra que parecía eterno, diciendo: “Están preparados para lo siguiente? Ustedes lo tienen que aguantar!, esta es una canción de nuestro segundo disco, esto se llama “Give’em war”; y el “Mosh pit” se hizo aun más violento y enérgico, como si esto fuera posible a esta altura del concierto. La gente gritó y coreó canción a canción con los puños arriba y las gargantas desgarradas. El “Frontman” con el micrófono en una mano y una botella de vino en la otra dijo: “Por fin tenemos un día libre, así que hoy vamos a ponernos un poco borrachos”, levantando la botella hacia el público, como haciendo un brindis. A continuación se dejaron oir “First world of terror”, “Blast off” y “Serpents of Parade”; a la cual presentó diciendo: “esta es para esos políticos que son como serpientes”, no sin antes pedir un fuerte aplauso para Sagros y de dar agradecimientos para Tayrona por el magnífico evento que organizaron.
El recital ya llegaba a su fin y Guillermo, desbordante de entusiasmo dijo: “espero que ustedes hayan disfrutado la mitad de lo que nosotros lo hemos hecho aquí arriba”, e inmediatamente se escucharon los sonidos del demoledor tema “You are next” entre luces violetas y naranjas; el coro de los asistentes fue ensordecedor durante los 5 minutos que dura esta magnífica canción salida del álbum “The Call”. El concierto terminó con la frase “¡muchísimas gracias Bogotá!”. La descarga fue total, estos “Ángeles sin Patria” habían dejado el alma en el recinto, y demostraron porqué han revolucionado el género en Europa, y hoy en día son considerados los máximos exponentes del metal Español en este siglo. Por lo demás, sobra decir que tanto la logística y la organización de todo el personal de Revolution Bar estuvieron impecables, todo orquestado, claro está, por Tayrona, que se comprometió íntegramente tanto con el público como con la banda, para llevar a cabo este increíble concierto.
Reseña por: Julieta Pinzón
Fotos por: Janine Verano y Sergio Zuluaga MetalliveColombia
