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TENEBRARUM es una banda que no le ha tenido miedo a cambiar su sonido, como una serpiente que muda su piel. Esta reinvención permanente le ha permitido explorar distintos estilos de metal y al tiempo la ha convertido en una banda pionera en el país, con 10 producciones discográficas cuyo hilo conductor ha sido el violín, el cual ha estado presente en el sonido de la agrupación desde su demo, estrenado en 1992.
Su más reciente producción, “Las Once Formas del Horror”, que fue lanzada al mercado a finales de 2018, rompe los paradigmas de una banda de metal tradicional eliminando la guitarra de sus nuevas composiciones, el instrumento más característico del género; y la reemplaza por un violín con distorsión. Blasfemia para los más puristas pero innovación para personas de mente abierta, esta arriesgada decisión ha producido un sonido único, sin comparación alguna con la música de otros representantes del género.
Este es un disco conceptual cuyo eje temático son distintas formas de miedo. La textura sonora de la banda tuvo que ser re adaptada al nuevo formato y para llenar el vacío de frecuencias medias dejado por la exclusión de la guitarra, en las nuevas composiciones se valieron de grandes orquestaciones y muchos interludios de piano clásico. El violín tuvo un tratamiento sonoro específico y a través de un poderoso modelador de sonido adquirió cuerpo, robustez y un tono verdaderamente único, lo que le da el filo y el cuerpo que las nuevas canciones requieren. El bajo, interpretado por Julián Rivera asume un rol preponderante porque sobre este instrumento recae buena parte de la pesadez que tenía la guitarra y después de muchas pruebas, se optó por dividir la señal en dos para que, de un lado, no perdiera las propiedades del instrumento y al tiempo, saturar con distorsión la señal y darle peso a los riffs. La sección de percusión, a cargo de Andrés Giraldo, debió copar con complejas figuras rítmicas los vacíos restantes y así completar este muro sónico. Cabe anotar que la banda tiene ahora tres vocalistas: David Rivera, quien además de ser el violinista y fundador de TENEBRARUM, decidió incursionar en este disco con una voz desgarrada, tipo black metal. Luis García, pianista y encargado de los arreglos orquestales hace voces guturales y limpias. Para completar este cuadro de voces la reconocida vocalista bogotana Nataly Ossman entró en 2018 como nueva integrante del grupo. El arte de la carátula del disco estuvo a cargo del artista antioqueño Giovanny Acevedo “Nuca” y el diseño y las fotos fueron hechas por el diseñador bogotano Jon Cadena.
En palabras de David Rivera: “Las Once Formas del Horror es el disco más pesado que hemos compuesto hasta la fecha. La gente que lo ha escuchado ha quedado verdaderamente sorprendida y ha reaccionado de la mejor manera, teniendo el álbum gran aceptación por parte de nuestros fans. Pudimos sustentarlo en vivo en la tarima principal de Rock al parque en Junio de este año y más de un escéptico se quedó con la boca abierta…”.
Actualmente los integrantes de TENEBRARUM están trabajando en nuevo material y David Rivera está escribiendo un libro para conmemorar los 30 años de este grupo pionero. La publicación verá la luz a mitad de 2020 y estará llena de historias sorprendentes y material gráfico nunca antes publicado. Además contará con contenido transmedia. También te contamos que la banda está en proceso de reeditar su icónico primer álbum, “El Vuelo de las Almas”, el cual se está vendiendo únicamente en preventa a través de sus redes sociales. Será una edición de lujo en digipack, remasterizada y con dos temas extras, además de un afiche. También puedes adquirir “Las Once Formas del Horror” escribiéndoles directamente o en puntos de venta autorizados.
Las redes sociales de TENEBRARUM son: Facebook, Instagram y YouTube
