“Rock al Parque 2017, Despidiendo a un Titán”

webmaster 2018-01-04 Reseñas 1,936 Views

“No vivas para ser, por temor
La presa de otros sueños,
Se vive una vez para ser
Eternamente libre”
– Muere Libre – Kraken I

Rock al Parque llegó en este 2017 a su edición número 23. Un festival que se encuentra entre los tres festivales gratuitos y al aire libre más grandes del mundo, y que conoció su primera versión a mediados de los 90’s gracias a la iniciativa de Mario Duarte, vocalista de La Derecha. Aunque como es bien sabido, géneros musicales como el Rock, el Punk y el Ska, entre otros, han pasado y siguen pasando por las tarimas de este gran evento, este festival ayudó en gran medida a la consolidación de la escena del metal nacional desde sus más tempranas ediciones.

Esta versión número 23 acopio un cártel de 66 agrupaciones entre las cuales se contaron 24 bandas internacionales y 42 nacionales, que se presentaron en sus tres días de duración. Además de ésto, el sábado 1° de julio, primer día del festival, se rindió un sentido homenaje al vocalista de la Banda colombiana Kraken, el maestro Elkin Ramírez, quien en enero de este año falleció en la ciudad de Medellín.

Para los amantes del heavy metal y seguidores de Kraken, ésta fue una oportunidad especial para dar un último adiós a este Titán, quien dedicó su vida a la música y estuvo involucrado de manera estrecha a las artes plásticas y la literatura. Escuchamos emotivamente las palabras de los que precedieron este homenaje diciendo: “el rock nacional perdió a su Titán, sin embargo el legado del hombre nacido en Medellín, que luchó todos los días de su vida por el rock nacional, está impregnado en cada acto de rock de nuestro país, fue quien nos enseñó que el rock es una forma de vida, una resistencia, fue quien le abrió la puerta a una escena que vivía en las sombras”.

Éste mismo día en sus tres escenarios, Plaza Bio y Eco, también fuimos testigos de las impecables presentaciones de 19 bandas que trajeron consigo sus mejores repertorios, y que hicieron parte de las categorías de invitados nacionales, invitados internacionales y convocatoria distrital.

Como es habitual, el Parque Metropolitano Simón Bolívar se fue llenando poco a poco, y con los asistentes iban apareciendo los estereotipos que también le dan identidad al festival. Chamarras de cuero, chaquetas o chalecos de Jean con parches, botas punta de acero, Reebok clásicas (negras o blancas), melenas bien cuidadas o enmarañadas, pelos teñidos de colores fuertes, crestas y también cabezas rapadas, cualquier “pinta” es bien vista en un festival como Rock al Parque, que además de promover la buena música, fomenta la convivencia y la tolerancia entre los que cada año a él asistimos.

Y ya que el sábado en R.A.P. es desde hace un buen tiempo sinónimo de Metal, la banda encargada de abrir el festival éste primer día en el escenario Plaza fue Umzac («Tinieblas», en lengua Chibcha), una agrupación bogotana de Gothic metal, que involucra elementos de la música clásica, la ópera y el rock progresivo, y los fusiona con ritmos tradicionales colombianos y andinos.

A pesar de algunos inconvenientes técnicos, la numerosa agrupación logró mostrar lo mejor de su EP titulado Usqua Quyca ( Hilando Historias) con una llamativa puesta en escena. Del mismo modo, se fueron sucediendo en los tres escenarios otras destacadas bandas nacionales tales como Fénix, Brand New Blood, Dead Silence, Cobra, Ekhymosis, Poker, Head Tambo, Organismos y Alcoholic Force, quienes tuvieron gran acogida por parte del público y dejaron la piel y el alma en el escenario.

Así mismo, fuimos testigos de bandas internacionales como Heaven Shall Burn, una agrupación alemana que combina el Metal extremo con letras antirracistas y de lucha contra la injusticia social, y que con su fuerte sonido desató un agresivo “mosh” que hizo vibrar el suelo del escenario Plaza. Vimos también en el escenario Bio, a las bellas y talentosas músicos de la agrupación brasilera Nervosa, quienes no escatimaron con la brutalidad de su puesta en escena y se robaron todos los aplausos de los asistentes, y de paso, uno que otro corazón.

A continuación, y con la oscuridad de la noche apoderándose del parque, llegaron a los tres escenarios las presentaciones bien ejecutadas de otras reconocidas bandas nacionales, éstas fueron Occultus de Cali, Reencarnación de Medellín, Herejía y Darkness de Bogotá. Esta última nos obsequió un caluroso show de despedida después de 30 años de carrera, y sin duda ratificó por qué el Metal colombiano sigue siendo una apuesta por la que vale la pena luchar en nuestro país.

Del mismo modo, disfrutamos del performance de los músicos de la banda capitalina Vein, quienes combinan la música con el art painting, y quienes hicieron temblar el parque con un extenso y enérgico “Pogo” que a muchos no les dió tiempo de reaccionar, era patear o caer. Simultáneamente en tarima, pudimos observar al artista plástico Iván Chacón, realizando en vivo una violenta e impactante serie de 3 obras con su veloz pero elaborada técnica en carboncillo, la cual reflejó la fuerza del sonido de ésta agrupación de Death Metal Bogotano.

Finalmente, y para lo que fue el cierre del capítulo del Metal en rock al parque 2017, tuvimos a las bandas internacionales Lamb of God y Death Angel el día Sábado, y a Obituary el domingo, esta última precedida de las bandas Blessed Extinction de la convocatoria distrital y Carnivore Diprosopus de la categoría Colombianos en el exterior, todas fueron bien recibidas por el público y las nos mostraron unas presentaciones sobresalientes y cargadas de lo mejor de sus repertorios.

Felicitaciones a todas las bandas de metal que hicieron parte de esta versión número 23 de Rock al Parque, gracias por inundar nuestros oídos con su música, la historia de este gran género se escribe por y para ustedes en las páginas de este magnífico festival. Larga vida al Metal \m/